Al menos 18 migrantes originarios de Venezuela y Haití murieron este viernes al volcarse el autobús en que viajaban en una carretera del estado mexicano de Oaxaca (sur), donde otros 27 resultaron lesionados, informó la fiscalía.
Apenas cinco días después de que diez cubanas, incluida una menor, fallecieran en un accidente vial en el estado de Chiapas (sur), otro siniestro se cobró la vida de dos mujeres, tres menores de edad y 13 hombres, señaló la fiscalía de Oaxaca en un comunicado.
Todos eran originarios de Venezuela y Haití, agregó el reporte, e intentaban alcanzar la frontera con Estados Unidos.
Un boletín del Instituto Nacional de Migración (INM) informó por su parte que en el vehículo viajaban 55 extranjeros y que entre las víctimas hay también ciudadanos peruanos.
El accidente ocurrió hacia las 05H00 locales de este viernes (11H00 GMT), cuando el conductor perdió el control del autobús y volcó sobre la carretera que une a las ciudades de Oaxaca y Cuacnopalan, en el vecino estado de Puebla (centro), precisó la fiscalía.
«Se tiene conocimiento que hay al menos 27 pasajeros lesionados, quienes fueron trasladados a hospitales cercanos para su atención médica», agregó.
El INM anunció que otorgará permisos humanitarios de residencia a los extranjeros lesionados que reciben atención médica y apoyará a los familiares de los fallecidos en la repatriación de los cuerpos y en los gastos funerarios.
Las muertes de migrantes en este tipo de siniestros vienen en ascenso. El 28 de septiembre dos de ellos perdieron la vida cuando volcó un camión en el municipio de Mezcalapa (Chiapas), que buscaba llegar al estado de Veracruz (este) por una vía rápida.
En febrero, un choque ocurrido entre los estados de Puebla y Oaxaca dejó 17 muertos y 15 lesionados, entre ellos migrantes de Venezuela, Colombia y Centroamérica.
El accidente más cruento se registró en diciembre de 2021, cuando un camión remolque que trasladaba a más de 160 migrantes chocó contra un puente en Chiapas, dejando medio centenar de muertos, la mayoría centroamericanos.
Ruta mortal
Ante el refuerzo de la seguridad por parte de México para combatir el tráfico irregular de migrantes, miles de personas de distintas nacionalidades atraviesan el país en autobuses, remolques, vehículos en mal estado o trenes de carga.
En el trayecto, sin embargo, sufren accidentes o ataques de criminales y en ocasiones de las propias autoridades.
Además de los que recorren las carreteras de manera clandestina, miles de migrantes permanecen en la ciudad de Tapachula, en Chiapas, en espera de que autoridades mexicanas les entreguen permisos para transitar por el país.
Otros miles se agolpan en las ciudades fronterizas con Estados Unidos esperando el momento oportuno para cruzar.
A mediados de septiembre, el mayor operador ferroviario mexicano suspendió 30% de sus operaciones, agobiado por el flujo de extranjeros sin papeles que se montan en los trenes de carga, arriesgándose a sufrir caídas mortales o mutilaciones por viajar en los vagones.
El gobierno mexicano informó este viernes que más de 27,000 migrantes fueron auxiliados o disuadidos de bajarse de los trenes entre el 18 de septiembre y el 3 de octubre, mientras la Cancillería coordina con los gobiernos de Venezuela, Brasil, Colombia, Cuba y Nicaragua su deportación por vía aérea.
Un informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) difundido el 12 de septiembre reveló que la frontera entre Estados Unidos y México fue la «ruta migratoria terrestre más peligrosa del mundo» en 2022, con 686 muertos o desaparecidos.
El gobierno mexicano ha admitido estar desbordado por la cantidad de migrantes que cruzan su territorio y reportó la detención de más de 189,000 solo en septiembre.
En agosto hubo un récord de casi 233,000 que cruzaron la frontera sur de Estados Unidos y la escalada continúa.