RD.- El senador por la provincia Hermanas Mirabal, Bautista Bauta Rojas Gómez, aprovechó la sesión de este jueves para expresar que el presidente Luis Abinader “debe dar gracias a Dios porque encontró un grupo de ingenuos y genuflexos en el Congreso Nacional” para aprobar iniciativas de ley y contratos sin los estudios y lecturas correspondientes.
El senador de la Fuerza del Pueblo se expresó así tras reprocharse a sí mismo por levantar su mano hace meses para aprobar el contrato de las vacunas con AstraZeneca, que hoy está siendo criticado por el retraso en las entregas de las dosis contra el coronavirus.
“Si nosotros los senadores nos pusiéramos de acuerdo, nos vamos de aquí con el rabo entre las piernas y le damos nuestro cargo al pueblo dominicano por hacer lo que estamos haciendo”, señaló.
En ese sentido, el congresista pidió perdón al pueblo dominicano por los contratos aprobados en el Congreso para que las farmacéuticas Pfizer y AstraZeneca traigan vacunas al país, unos acuerdos que, según el senador, tienen puntos que afectan a todos los dominicanos.
En específico, Rojas Gómez admitió que los senadores tuvieron “una falta de lectura” con los contratos de Pfizer y AstraZeneca ya que ambas farmacéuticas, en los convenios, se desligan de cualquier consecuencia en caso de que las vacunas se retrasen.
“Todo eso lo dice el contrato que aprobamos y por el que yo levanté la mano. Yo mismo me estoy recriminando”, sostuvo el legislador mientras leía varios puntos de los contratos.
Con el acuerdo de Pfizer, el senador leyó que la farmacéutica Pfizer se libera de seguir el cronograma establecido de entrega de vacunas acordado entre las partes y que además no se consigna una fecha establecida y agregó que la empresa no tiene penas por retrasar las dosis.
En otra cláusula, Rojas Gómez apuntó que, en el contrato, República Dominicana pierde la soberanía sobre activos en caso de disputas o arbitraje u otro procedimiento legal, aspectos que también deploró fueran aprobados en el Senado.
Con todas estas quejas, Rojas Gómez deploró que desde el Senado y la Cámara de Diputados se impulse la costumbre de no leer los contratos que envíe el Poder Ejecutivo.
